Según el Compendio Estadístico de Vivienda 2018 del Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos, aproximadamente 235.371 personas habitan en condominios o conjuntos residenciales en el país. Cada vez más personas, principalmente aquellas que habitan en la Gran Área Metropolitana, optan por este estilo de vivienda debido a los múltiples beneficios que ofrece, tales como seguridad, amenidades y la vida en comunidad.
Sin embargo, para asegurar una buena convivencia entre los vecinos y una correcta gestión de todas las operaciones, es fundamental que los administradores sean profesionales capacitados con conocimentos en diversas áreas. De esta manera lograrán atender de manera correcta todas las necesidades de las personas que habitan en estos conjuntos residenciales y podrán velar porque se cumplan los reglamentos y disposiciones de la administración.
“Muchas veces bajo la mentalidad de que ahorrando el pago de una administración vamos a economizar, se descarta la posibilidad de una asistencia profesional sin considerar las ventajas de tener un buen administrador. Un buen administrador debe tener conocimientos en administración, contabilidad, cobro judicial, servicio al cliente, seguros y la Ley Reguladora de la Propiedad en Condominio. Debe tener la capacidad de gestionar y supervisar la operación y mantenimiento de condominios, además de desarrollar funciones administrativas de apoyo como seguros, contabilidad y administración general. El ahorrar en la administración muchas veces no es la mejor solución” comentó Francisco Gamboa, Gerente General de Naret, empresa de administración inmobiliaria.
Según explica Gamboa, el papel de “administrador de un condominio” es el equivalente al gerente general de una empresa, por lo que tiene la responsabilidad total de la operación, manejo del efectivo y aplicación del reglamento inscrito legalmente. Es una mezcla de trabajo operativo, seguimiento contable y servicio al cliente. Todas las áreas de gestión se realizan buscando la correcta comunicación con todos las personas que habitan en el condominio.
Asimismo, los administradores de condominios deben estar al tanto de las obligaciones y responsabilidades de todos sus usuarios. En los últimos meses con la llegada de la pandemia, las exigencias han cambiado considerablemente al haber una necesidad mayor de desarrollar la vida laboral desde los hogares, lo que en ocasiones genera tensiones en la convivencia entre vecinos y las cuales los administradores deben resolver de manera oportuna.
Es por esto que los administradores de condominios deben estar en constante capacitación con el fin de conocer las nuevas necesidades que surgen e ir adaptando sus servicios para lograr una mejor convivencia entre todos los habitantes de los complejos. Tal es el caso de Naret, quien ha realizado inversiones en tecnología de punta para minimizar el error humano y aumentar la calidad del servicio. Asimismo, ofrece un esquema financiero completo, personal general para el mantenimiento del inmueble y todo el soporte legal requerido.
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Esta empresa forma parte del complejo empresarial Grupo Laguna y administra actualmente más de 100 condominios. En el último año desarrolló una aplicación para el uso de los clientes denominada “Naret App” e implementó el primer sistema de votación digital para las asambleas virtuales de los condominios. Asimismo, proyecta expandir el área de cobertura en la que brinda el servicio, ampliar su cartera al área industrial y continuar invirtiendo en capacitación y profesionalización de sus administradores.
Para que haya una gestión exitosa, la culturización de los usuarios es una necesidad. Esto permite mejorar la convivencia entre las personas, a la vez que se promueve una comunicación constante entre la administración y el condómino. Asimismo, la tecnología y la innovación en todos los procesos, son las principales herramientas para maximizar la operación en estos conjuntos residenciales.
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