Hace un año, El Salvador se encontraba bajo confinamiento que obligó a que los proyectos de construcción se detuvieran. La crisis empujó a la industria a un desplome superior al 10 % en 2020, pero el panorama parece optimista para 2021 con una perspectiva de expansión del 4 %, según estimaciones de Central American Business Intelligence (CABI) publicados por el Medio El Mundo.
Ricardo Rodríguez, experto de la CABI, señaló ayer en un foro virtual que la construcción será el tercer rubro que más se expandirá en 2021 y solo es superado por la industria no alimenticia (textiles, plásticos, metales) con una tasa superior al 7 % y la cadena de hoteles y restaurantes con más del 5 %. El especilista, enfatizó que, aunque la industria de la construcción se expanda en 2021, no será suficiente para recuperar el terreno perdido en 2020. “Pensaría que ante las condiciones actuales es muy probable que sea en 2022 que el sector pueda salir por completo de la crisis”, señaló.
El Mundo afirma que esa recuperación está condicionada a que no exista una interrupción en los planes de inversión, que las perspectivas económicas no se degraden y se logre controlar la pandemia a través de la vacunación, explicó.
A inicios de 2021, la Casalco informó que la industria de la construcción tenía en el radar una inversión cercana a los US$1,200 millones en proyecto que podrían finalizar en 2022. Luis Dada, presidente de la gremial, confirmó que trabajan con las instituciones estatales para agilizar trámites que desencadenan en nuevos anuncios de proyectos.
Dada indicó que la Casalco lidera negociaciones con el Ministerio de Vivienda para implementar la ley de inclusión habitacional que permita el “resurgir” del sector. También, esta semana se reunieron con titulares del Organismo Promotor de Exportaciones e Inversiones de El Salvador (Proesa) para discutir nuevas opciones de asocios públicos privados “para generar un mayor impulso en nuestro sector”.
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