La economía panameña se ha dinamizado en los últimos años por esos grandes proyectos de infraestructura que sobresalen en toda América Centreal, pero también la inversión privada ha jugado un rol importante en la industria de la construcción.
Por: Luis Fernando Arévalo, luis.arevalo@connectab2b.com
Panamá es uno de los países que más avances ha tenido en materias de construcción e infraestructura. Se ha convertido en un referente en la región por su alto grado de desarrollo económico que ha permitido tener obras emblemáticas.
El centro comercial más grande de América Central, los edificios de mayor altura y mayor tecnología y sobre todo, las obras de infraestructura más importantes, se encuentra en Panamá.
El Ing. Alejandro Ferrer, actual presidente de la Cámara Panameña de la Construcción (Capac), cuenta con una amplia trayectoria de más de 20 años en la industria de la construcción y comparte con los lectores de revista Construir, su visión sobre la evolución del sector construcción en su país.
¿Cómo ha evolucionado el sector construcción en Panamá en los últimos 10 años?
Panamá ha sido un país que históricamente ha encontrado en la construcción un segmento de la economía bastante fuerte, entendiendo que la economía en Panamá es bastante diversificada.
La construcción tiene un peso histórico en el Producto Interno Bruto (PIB) que antes de la pandemia llegó a un 18%. Obviamente, la pandemia trastocó todas estas cifras, entendiendo que hace cuatro años estábamos saliendo apenas de la cuarentena de la pandemia, la construcción comenzó a retomar sus actividades y a salir de un hueco en donde se encontraba con la activación de proyectos importantes en el sector privado y también obras de infraestructura pública. Pero poco a poco la construcción ha recuperado ese terreno que había perdido, y hoy por hoy estamos cerca de representar el 14% del PIB nacional, todavía hay espacio que recuperar pero estamos volviendo a ser el actor principal en la economía panameña.
La construcción en Panamá se ha visto dinamizada por grandes proyectos de infraestructura en los últimos años: tenemos dos líneas del metro operando y una tercera línea que está en construcción. En el año 2009 se comenzó con la ampliación del canal de Panamá y se construyó un tercer puente sobre este mismo, y se tiene previsto construir un cuarto puente.
Panamá ha destacado por el uso de nuevas tecnologías en la construcción ¿Cómo ha sido el impacto de esto en el país?
Lo hemos visto desde estos proyectos de gran envergadura, por ejemplo la primera línea del metro en la Ciudad de Panamá tiene varios tramos subterráneos que necesitaron tuneladoras para ser construidos, una tecnología que en ese entonces no tenía el país y que no se habían utilizado en ese escala. Además, este tipo de obras también han impulsado el uso de prefabricados a gran escala, por ejemplo para soporte de las vías del metro se utilizaron vigas de hasta 30 metros de largo, usando toda una línea de producción de vigas prefabricadas de gran escala, incluyendo grúas y todo el equipo para el ensamblaje.
En el tema de los puentes sobre el Canal de Panamá, también se utilizaron sistemas constructivos que no se usan a diario en el país y que también han sido parte de las innovaciones. Todo esto ha resultado en un aprendizaje importante para el sector construcción.
Viendo hacia el futuro ¿Cómo visualiza el sector construcción en Panamá y las tendencias que predominarán?
En Panamá tenemos un reto inmediato que es asegurar las fuentes de agua para consumo humano y para el tránsito de barcos sobre el canal. No es desconocido para nadie que los fenómenos naturales hoy por hoy ponen a prueba nuestras capacidades y en el caso nuestro las fuentes de almacenamiento de agua. Panamá tiene un gran reto de establecer una política de administración de recursos hídricos.
Ya están realizando estudios para establecer una solución que le de tranquilidad a todas las proyecciones de desarrollo e inversión que tiene el país. En materia de infraestructura el Gobierno está planificando construir un ferrocarril que conecte la Ciudad de Panamá con la Ciudad de David, la provincia que limita con Costa Rica, una línea ferroviaria de más de 500 kilómetros que sería un impulso a la logística interna de nuestro país.
Siempre hay espacio para el mejoramiento de infraestructura vial. El Gobierno anterior licitó bajo la modalidad de Asociaciones Público Privadas, una carretera en la Panamericana Este, desde Chepo hacia la provincia de Darién y otra que llega hacia la ciudad de Santiago. Hay proyectos importantes en materia de recursos hídricos y de infraestructura para los próximos años en Panamá.
¿Cómo ha visto el compromiso del sector privado de apostarle al tema de la sostenibilidad?
El sector privado juega un papel importante siempre y hemos procurado siempre tener los canales de comunicación con los gobiernos de turno para que podamos trabajar en conjunto en esta clase de proyectos. Las empresas extranjeras han tenido un rol importante en Panamá, pero queremos que las empresas locales también sean protagonistas en estos temas de sostenibilidad y que puedan aprovechar de las grandes empresas extranjeras, una transmisión de conocimientos.
¿Cuáles son las mejores prácticas que se adoptan en Panamá para ser sostenibles?
Precisamente en este tema, tenemos un manual que se llama “Las buenas prácticas en construcción”, el cual permite que las obras tengan un menor impacto en el entorno en donde se desarrollan y entre los temas que abordan se encuentre el tratamiento adecuado de los desechos de construcción, la protección de predios aledaños durante movimientos de tierra y la integración de elementos que aporten a la eficiencia energética, entre otros.
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